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Consigue aportar a tus paredes el aspecto y las texturas de los tejidos con las ventajas del papel pintado.
Papeles pintados que recrean de forma espectacular a todo tipo de tejidos y materiales textiles para que puedas usar en tus paredes elementos como la seda, el lino, la arpillera...
Los papeles pintados con manchas son perfectos para crear ambientes modernos y con un toque abstracto.
Rollos de papel pintado que pueden pintarse fácilmente con cualquier pintura plástica. Ideal para paredes con pequeñas imperfecciones que se disimulan al aplicarles este revestimiento.
Papel pintado GR322404 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322405 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322406 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322407 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322408 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322501 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322502 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322503 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322504 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322505 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322506 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322507 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322508 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322509 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado GR322701 de la colección Grace de kemen.
Papel pintado con acabado textil en color carne claro mate, con bastante relieve superficial, que imita muy bien la urdimbre o entramado de una tela que parece una loneta gruesa. Perfecto para decoración elegante y atemporal, proporcionando una textura neutra a tus paredes.
Papel pintado con acabado textil en color blanco roto mate, con bastante relieve superficial, que imita muy bien la urdimbre o entramado de una tela que parece una loneta gruesa. Perfecto para decoración elegante y atemporal, proporcionando una textura neutra a tus paredes.
Papel pintado con acabado textil en color gris claro mate, con bastante relieve superficial, que imita muy bien la urdimbre o entramado de una tela que parece una loneta gruesa. Perfecto para decoración elegante y atemporal, proporcionando una textura neutra a tus paredes.
Papel pintado que parece chapa metálica oxidada con dibujo de rayas moteadas de piel de animal, tipo cebra, en color negro y bronce con bajorrelieve de manchas metalizadas. Empapela tu pared fácilmente con este revestimiento de estilo étnico y moderno.
Papel pintado que parece estuco con base blanca. Empapela tu pared con este revestimiento de estilo industrial, elegante y moderno, que tiene ligero relieve granulado y manchas en bajorrelieve de color blanco nacarado.
Papel pintado que parece estuco con base gris rosado. Empapela tu pared con este revestimiento de estilo industrial, elegante y moderno, que tiene ligero relieve granulado y manchas en bajorrelieve de color plata vieja.
Papel pintado pintura de tiza con textura de lino blanco mate
Papel pintado pintura de tiza con textura de lino beige crema claro
Papel pintado pintura de tiza con textura de lino gris claro cálido
Los papeles pintados con textura son elegantes, atemporales y nada recargados, no tienen dibujos y reproducen, en algunos casos a la perfección, los acabados de diferentes materiales, destacando:
Las texturas finas de las telas (el lino, la loneta, el algodón, la tela de saco, la seda y el moiré, entre otros tejidos están perfectamente imitados en estos revestimientos murales).
Las texturas exóticas de las fibras vegetales (la paja, el bambú, las cañas, el yute...).
Las texturas siempre elegantes de las arrugas, ondulaciones y pliegues (imitando a las que encontramos en papeles o telas).
Las texturas rústicas de las piedras, el mármol, las areniscas, los estucos venecianos, las paredes rugosas, el estuco a la cal y la pintura con aguas o manchas.
Y por último unos papeles pintados pintables con gran relieve decorativo que te permitirán empapelar las habitaciones con efectos sorprendentes de alta decoración.
Los papeles pintados con textura son elegantes, atemporales y nada recargados, no tienen dibujos y reproducen, en algunos casos a la perfección, los acabados de diferentes materiales, destacando:
Las texturas finas de las telas (el lino, la loneta, el algodón, la tela de saco, la seda y el moiré, entre otros tejidos están perfectamente imitados en estos revestimientos murales).
Las texturas exóticas de las fibras vegetales (la paja, el bambú, las cañas, el yute...).
Las texturas siempre elegantes de las arrugas, ondulaciones y pliegues (imitando a las que encontramos en papeles o telas).
Las texturas rústicas de las piedras, el mármol, las areniscas, los estucos venecianos, las paredes rugosas, el estuco a la cal y la pintura con aguas o manchas.
Y por último unos papeles pintados pintables con gran relieve decorativo que te permitirán empapelar las habitaciones con efectos sorprendentes de alta decoración.